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Tienes razón, el compliance no es para ti

Diego Davalillo De Luis • 18 de abril de 2024

Es común que los administradores de pequeñas y medianas empresas (PYMEs) subestimen la importancia del cumplimiento normativo, ya sea porque consideran que su empresa es demasiado pequeña para enfrentar riesgos legales significativos o porque creen que sus operaciones son lo suficientemente simples como para no necesitar un programa de compliance. Sin embargo, esta mentalidad podría poner en peligro el futuro de la empresa. En este artículo, desmitificaremos estas ideas erróneas y explicaremos por qué el cumplimiento normativo es esencial para todas las PYMEs, independientemente de su tamaño o sector.


El empresario debe ser proactivo e involucrarse de lleno en la implementación del compliance en su negocio. No basta con delegar esta responsabilidad; es esencial que el liderazgo muestre un compromiso real y tangible. Esto no solo garantiza que las políticas se adapten perfectamente a las particularidades de la empresa, sino que también fomenta una cultura de cumplimiento y ética entre los empleados. La presencia activa del empresario en el proceso de compliance envía un mensaje claro y poderoso a todos los niveles de la organización: el cumplimiento no es opcional, es una prioridad estratégica. Además, la implicación directa del empresario permite una mejor identificación y gestión de los riesgos específicos de la empresa, asegurando que el programa de compliance sea efectivo y relevante.

Si buscas maneras de convencerte de que no necesitas compliance, seguro encontrarás alguna excusa. Pero la realidad es que sin un compromiso genuino y proactivo, el compliance no es para ti. La implicación personal del empresario es clave para que las políticas de compliance no sean solo un conjunto de reglas, sino una parte integral y efectiva del ADN de la empresa. Al no involucrarse, el empresario corre el riesgo de implementar un programa superficial que no aborda los verdaderos desafíos y riesgos de la empresa. La falta de un liderazgo comprometido puede llevar a un cumplimiento simbólico que no protege a la empresa ni mejora su reputación. En resumen, si el empresario no está dispuesto a liderar con el ejemplo y a dedicar los recursos necesarios, es mejor no engañarse: el compliance, en ese caso, no funcionará.


Desmitificando los Mitos:


  • Mi empresa es demasiado pequeña para preocuparse por el compliance:

Muchos administradores de PYMEs pueden pensar que el cumplimiento normativo solo es relevante para grandes corporaciones con recursos y operaciones más complejas. Sin embargo, el tamaño de una empresa no determina su exposición al riesgo legal. Las PYMEs también están sujetas a leyes y regulaciones, y pueden enfrentar consecuencias financieras graves por incumplimiento, como multas y litigios. Además, algunas regulaciones están diseñadas específicamente para proteger a las pequeñas empresas y a los consumidores que interactúan con ellas.


  • Nuestra actividad comercial es muy común y no enfrentamos riesgos significativos:

Es posible que los administradores de PYMEs en industrias consideradas de bajo riesgo crean que no necesitan preocuparse por el cumplimiento normativo debido a la simplicidad de sus operaciones. Sin embargo, todas las empresas, independientemente de su sector, están sujetas a regulaciones que deben cumplir. Ignorar estas regulaciones puede conducir a problemas legales y financieros. Además, el incumplimiento de ciertas normativas, como las relacionadas con la protección de datos o la seguridad laboral, puede tener repercusiones graves para la empresa y sus empleados.


  • No necesitamos un programa de compliance porque somos una empresa familiar y confiamos en la honestidad de nuestros empleados:

Si bien la confianza en los empleados es importante, un programa de compliance no se trata solo de detectar comportamientos fraudulentos o deshonestos. También se trata de establecer políticas y procedimientos para garantizar que la empresa cumpla con las leyes y regulaciones aplicables. Incluso los empleados bien intencionados pueden cometer errores que pongan en riesgo la empresa si no se les proporciona una guía clara sobre cómo cumplir con las normativas. Además, un programa de compliance sólido puede proteger la empresa en caso de que un empleado deshonesto decida actuar en contra de sus intereses.


  • Cumplir con todas las regulaciones es demasiado costoso y complicado para nuestra empresa:

Detalle: Si bien es cierto que implementar un programa de compliance puede requerir inversión de tiempo y recursos, no cumplir con las regulaciones puede ser aún más costoso en términos de multas, litigios y daños a la reputación. Además, existen recursos y herramientas disponibles para ayudar a las PYMEs a cumplir con las regulaciones de manera rentable y eficiente. Estos pueden incluir capacitación en cumplimiento normativo, software de gestión de riesgos y consultoría especializada.


Riesgos a los que se enfrentan las PYMES:


  1. Responsabilidad penal de los administradores: La falta de un programa de compliance puede exponer a los administradores y directivos de la PYME a la responsabilidad penal por incumplimientos normativos, lo que puede tener graves consecuencias legales y personales.
  2. Exposición a sanciones financieras y legales: El incumplimiento de las leyes y regulaciones puede resultar en multas significativas, penalizaciones financieras y litigios costosos, lo que representa el riesgo más grave para una PYME.
  3. Daño a la reputación empresarial: Una reputación dañada puede afectar negativamente las relaciones comerciales, la confianza del cliente y la capacidad de la empresa para atraer nuevos clientes o socios comerciales, lo que es un riesgo considerable para su sostenibilidad a largo plazo.
  4. Riesgo de fraude interno: El fraude interno, como la malversación de fondos o los conflictos de interés, puede causar pérdidas financieras significativas y erosionar la confianza en la empresa, lo que lo convierte en un riesgo importante para la integridad y la estabilidad financiera de la PYME.
  5. Falta de preparación para oportunidades de financiamiento y colaboraciones comerciales: Perder oportunidades de financiamiento o colaboraciones comerciales debido a la falta de un programa de compliance efectivo puede limitar el crecimiento y la expansión de la PYME, lo que representa un riesgo significativo para su desarrollo futuro.
  6. Cultura empresarial deficiente: Una cultura empresarial deficiente puede llevar a la desmotivación de los empleados, el aumento de la rotación del personal y la falta de compromiso con los objetivos de la empresa, lo que supone un riesgo para la productividad y la estabilidad organizacional.
  7. Dificultades en el crecimiento y la expansión: La falta de procesos y controles sólidos puede dificultar la gestión del crecimiento y la expansión de la PYME, lo que limita su capacidad para aprovechar nuevas oportunidades de mercado y diversificar sus operaciones.
  8. Mayor riesgo de responsabilidad personal: Los líderes de la PYME pueden enfrentar una mayor responsabilidad personal por incumplimientos normativos si no se implementan medidas adecuadas de compliance, lo que puede exponerlos a consecuencias legales y financieras adversas.
  9. Pérdida de diferenciación competitiva: La falta de compromiso con el cumplimiento normativo puede hacer que una PYME pierda su ventaja competitiva al no poder diferenciarse en base a la integridad y la responsabilidad empresarial, aunque este riesgo puede ser menos inmediato que los anteriores, puede tener impactos a largo plazo en la viabilidad de la empresa en un mercado competitivo.


En conclusión, el cumplimiento normativo no es una preocupación exclusiva de las grandes corporaciones; es esencial para todas las PYMEs que desean proteger su futuro y mantenerse competitivas en un mercado cada vez más regulado. Al implementar un programa de compliance, estás invirtiendo en la seguridad y el éxito a largo plazo de tu empresa. No esperes a que sea demasiado tarde para actuar; haz del cumplimiento normativo una prioridad desde hoy mismo.

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